Olivia Smart & Adrián Díaz fueron los mejores representantes españoles en Milán, consiguiendo patinar su Danza Libre y luchando por entrar en el TOP10, lo que hubiera dado a España dos plazas en el Mundial de Patinaje Artístico del año que viene. Los Campeones de España patinaron una muy buena Danza Corta, con una pequeña imprecisión en los primeros twizzles, que no les despistó para realizar una gran rutina. El programa les sirvió para acabar en duodécima posición con 63.73 puntos. Una excelente clasificación, aunque traía un peligro. Y es que estaban en un grupo formado por seis parejas tan sólo separadas por un punto. Ya en la Danza Libre, bailaron una danza preciosa. Juntos, coordinados y con una química muy notable, la pareja subió el nivel de la competición y consiguió su mejor marca personal en el Libre; 98.32. En total, Olivia & Adri quedaron con una puntuación de 162.05 y se quedaron a las puertas el décimo lugar; siendo de nuevo duodécimos a tan sólo 3 puntos del TOP10.
También estuvieron brillantes Aritz Maestu & Laura Barquero, que cabe recordar que debutaban en un Mundial. La Pareja ha mostrado un progreso increíble en esta temporada, subiendo una barbaridad en su calidad de patinaje desde iniciarse esta temporada. Para poder comparar su cambio de nivel sólo hace falta ver su progreso en las puntuaciones. En el Campeonato de España de Jaca del pasado diciembre de 2017, Aritz & Laura consiguieron una puntuación de 46.81 en el Programa Corto. Tan sólo tres meses después, en el Mundial de Milán, la Pareja recibió una puntuación de 58.36 en ese mismo Programa Corto, su mejor marca personal de largo. Aritz & Laura hicieron una rutina preciosa a la par que limpia y su creciente química la demuestran en el hielo cada vez que salen a patinar y los resultados obtenidos son buena prueba de ello. Con esta puntuación, fueron vigésimos y no estuvieron en el Libre, pero aspiran a cotas muy altas visto lo visto esta temporada.
Lo único negativo de este Mundial de Patinaje Artístico fue la categoría masculina. Javier Raya tuvo un día desacertado y no le salieron los elementos que llevaba preparados y que en otras ocasiones había hecho limpios casi con los ojos cerrados. Pero en Milán, no pudo ser. A veces el deporte puede ser cruel con el esfuerzo y entrenamiento de un competidor y en esta ocasión le tocó sufrirlo a Javier Raya. Con su rutina, el patinador acabó con 50 puntos y quedó lejos de poder clasificarse en el Libre. Pese a la evidencia del mal sabor que deja una situación cómo ésta, y más siendo final de temporada, hay que confiar en que Javier Raya volverá a mostrar su gran nivel de patinaje en una importante competición. Ya lo ha hecho y es más que capaz de repetirlo.
